La recría puede ser una aliada clave para compensar kilos producidos

“Si bien las recrías han comenzado a consolidarse en los últimos años, durante el presente ciclo se ha visto particularmente acentuado”, según analizó el mercado ganadero ROSGAN.

En general se considera recría a partir del destete del ternero y hasta el momento en que el animal llega a un peso vivo a partir del cual están en condiciones de ser sometidos a una dieta más intensiva para su terminación. Esto considerando solo la recría con destino a engorde y faena, diferente a la recría de hembras con fines reproductivos cuyo acompañamiento se da hasta el momento en que esa hembra esté en condiciones de recibir su primer servicio.

“En ocasiones, debido a la sequía o a la falta de liquidez financiera de los criadores, las recrías comienzan con destetes anticipados que posteriormente son sometidos a ofertas forrajeras deficientes en cuanto a lo nutricional y altamente condicionadas por los ciclos naturales de producción. Bajo este tipo de manejo, la recría muchas veces queda asociada a una alternativa barata y de baja inversión que permite cubrir este tipo de necesidades estacionales. Sin embargo, algo está cambiando en esta concepción que hoy comienza a verse como una aliada clave para lograr una producción de animales llegando con más kilos a la faena”, explica el informe.

Si la cantidad de terneros no sube, incluso en esta año tuvo 650 mil animales menos que el anterior, se debe pensar en sostener de otra forma los kilos de carne vacuna a producir. Entonces la recría debe ser considerada como un momento determinante para el animal a lograr.

Según el análisis ROSGAN: Si bien las recrías han comenzado a consolidarse en los últimos años, durante el presente ciclo se ha visto particularmente acentuado.

De acuerdo a los datos de movimientos de hacienda que informa el SENASA, de enero a noviembre de este año se registró el traslado de 17,3 millones de animales con destino a campos de cría e invernada. De este total, sólo 2,9 millones han ingresado a establecimientos de engorde a corral para su terminación mientras que el resto (14,4 millones) permaneció a campo, por supuesto, con diferentes grados de suplementación.

Estos mismos datos, dos años atrás, en 2019, mostraban un movimiento total de animales, 17,25 millones de bovinos, de los cuales 3,9 millones tenían por destino otros establecimientos de engorde a corral. Es decir que, en los últimos dos años, el feedlot pasó de representar el 22,5% de todo el movimiento de hacienda de invernada, a capturar sólo un 16,9% este año. En términos absolutos, esto representa un pasaje de nada menos que 1 millones de animales que antes ingresaban a los corrales y hoy permanecen en los campos, prolongando sus recrías e invernadas de base pastoril.

Un aspecto fundamental a tener en cuenta es la eficiencia productiva que se logra en este tipo de sistemas. Mediante la intensificación de las recrías es posible pasar de vender un producto terminado de 300/320 kilos a 400 kilos o más, ganando kilos a menor costo. Es decir que, esto no solo implica un incremento en la producción de carne por animal en stock, sino que también resulta más eficiente en materia de costos de alimentación, tan importante para el engorde ante este nuevo nivel de valores de los granos que no pareciera tener mucho margen para ceder en el mediano y largo plazo.

Asimismo, la recría aporta “flexibilidad a la hora de definir la terminación y destino del producto final”.

Actualmente los pesos medios de faena en Argentina rondan los 230kg por res, habiendo crecido cerca de 3kg en el último año. Aun así, todavía se encuentran muy lejos de los pesos medios logrados por nuestros vecinos, Uruguay y Brasil, con faenas en torno a los 260kg e incluso Paraguay con promedios cercanos a los 245kg por res.

Por último, trabajar con sistemas que permitan lograr animales más pesados, otorga además una mayor versatilidad para adaptar el producto final a lo que esté buscando la industria frigorífica, conforme las oportunidades que presente su demanda, indicó el informe.