«Temor a la chicharrita, necesidad de lluvias en septiembre, “Niña” acechando y márgenes ajustados», son las causas de la reducción en la superficie de cultivo de maíz según anticipa la BCR.
El maíz 2024/25 se presenta con mucha incertidumbre y temor. La siembra podría caer un 30% en comparación con el año pasado.
El informe de la bolsa rosarina, publicado por Marina Barletta, Florencia Poeta y Cristián Russo, indica que el escaso nivel de agua en los perfiles requiere la llegada de lluvias, y se anticipa que habría una caída del 30% para este cultivo en la región núcleo. Entonces el maíz cubriría sólo 1,38 millones de hectáreas, frente a los dos millones de la campaña anterior.
La cifra de caída sería de 590.000 hectáreas menos debido a la incertidumbre que afecta al maíz. El recorte en la intención de siembra, según encuestas, oscila entre un 20 y un 50%. De todas formas, el factor clima será clave, y la recarga de agua para la siembra tiene que ser oportuna porque no hay posibilidades de sembrar en diciembre.