“Sistemas electrónicos para una ganadería de precisión” fue el tema que desarrolló Aníbal Pordomingo (INTA Anguil) en la jornada virtual que el IPCVA realizó ayer en Santa Fe.
El ingeniero destacó que la ganadería en Argentina va incorporando la precisión y la tecnología gestionada a través de instrumentos de sensores y de procesos automatizados. Todo se da dentro de tendencias globales para la producción ganadera mundial.
El disertante manifestó que en los países exportadores y que tienen un producto diferenciado se puede ver “un eje transversal (…) como la gestión automática remota, instrumentos para tomar decisiones en tiempo real y lo asociado al manejo del individuo”. A esto se puede agregar la genética, la conversión del alimento, todo lo asociado a mirar al animal desde adentro viendo rendimiento carnicero y otros de sus atributos que hablan de eficiencia y homogeneizar el rodeo, también la tendencia a reemplazar los antibióticos que no tienen una buena percepción social y se pueden cambiar por nuevos insumos que promueven inocuidad y calidad, además se debe pensar en la nutrigenómica como una alimentación para disparar la expresión de los genes en etapas tempranas, y por último está la cuestión de higiene, sanidad y salubridad. Todo esto requiere un conocimiento e identificación del individuo.
En Argentina la trazabilidad debe ser vista como una verificación hacia atrás, “porque si podemos mirar los individuos desde el final la toma de decisiones se puede hacer con base en las relaciones con sus parientes”, identificando el origen y planificando a futuro. Con la caravana electrónica se hace un avance y el lector fijo o móvil generó un avance importante. En esto la industria de la lechería estaba adelantada al buscar una identificación rápida del animal y poder asignarle alimentos con suplemento de forma individual.
Pordomingo destacó también el uso de drones, sensores para evaluar el consumo individual o detectar celo, balanzas de pesada al paso y registro del animal muy útil en sistemas extensivos, o barreras virtuales con las caravanas para ver el posicionamiento geográfico del animal. Todo lo que permite individualizar, ver el interior sin afectar al bovino, conocer su rutina y todo el monitoreo a la distancia de forma permanente.
