Daniel Dubie, médico veterinario que integra la coordinación del Plan Provincial de Venéreas del colegio profesional en La Pampa, recordó: “Los raspajes normalmente se hacen desde principios de año hasta septiembre porque es la fecha en la que se espera que el productor vea su hacienda e identifique a los toros enfermos. Se supone que si han hecho las tareas de saneamiento ya saben qué reproductor descartan y cuántos necesitan para reponer”.
Con la fecha límite de los raspados para el 30 de este mes, una de las consecuencias de no cumplir con ese plazo es el impedimento posterior para mover hacienda. Dubie indicó a RD que los productores que no lo hagan se verán imposibilitados de realizar movimientos con sus animales y para normalizar su situación igual deberán cumplir luego con este requisito de sanidad.
El veterinario manifestó que en la provincia hay una buena respuesta de los productores. La Pampa tiene el plan funcionando desde el año 2006 en algunos departamentos, para llegar a generalizar en toda la provincia a partir del 2008.
“Es un plan obligatorio y La Pampa es la única provincia en el país que lo tiene. Esto a permitido aumentar la eficiencia en los rodeos para la producción de terneros y para que la cantidad de toros sea óptima. Al principio se registraban unos 80.000 reproductores y ahora estamos en unos 50 mil pero se incrementó igual la cantidad de crías. Esto significa que había muchos toros pero no servían por enfermedades venéreas o de otro tipo, o porque tenían una lesión, y estaban en el rodeo sin poder cumplir con el servicio”, explicó.
El profesional indicó que a través de SENASA se va gestionando, porque el productor acuerda con el veterinario el día de raspados, se sube la información al SIGSA, y si hacen una auditoría en el campo se sabe el día y la hora de actividad. Los datos quedan registrados en una plantilla digital, y con un código de identificación el laboratorio que analiza las muestras puede hacer un seguimiento de los toros por establecimiento. Los resultados de los raspados dan lugar a la certificación del Colegio Veterinario de La Pampa, y hoy se pide que entre el 75 y el 80% de los reproductores del establecimiento cumplan con este requisito.
Dubie dijo que las fechas a veces se ha extendido hasta octubre, pero eso ocurre en los años con sequía por cuestiones de manejo de los bovinos. En este 2021 a fines de septiembre se dará por concluido el plazo. “La recomendación es que cumplan con todo este mes para que después no tengan retrasos cuando vayan a intentar mover sus animales”, consideró.