Integrantes de la Fundación Argentina de Erradicación de la Fiebre Aftosa (FAEFA) presentaron el modelo de riesgo de brote de fiebre aftosa en el país dentro del Congreso Nacional de Sanidad que organiza CRA para hoy y mañana.
En el marco del congreso que convoca a especialistas en la temática fue presentada la «Evaluación de riesgo para el ingreso de fiebre aftosa en la República Argentina desde países limitrofes», Juan Dotta, médico veterinario y asesor técnico de FADEFA explicó que el plan de análisis incluye la evaluación cualitativa de los países limítrofes y también cuantitativa viendo la probabilidad de que haya un brote de enfermedad por el ingreso legal o ilegal de animales.
Para ello se observan los planes de cada país, y en cuanto a la vigilancia sanitaria pasiva, con notificaciones, consideró que es una variable que se ve como una debilidad porque es bastante escasa.
Además, en los planes de contingencia y emergencia hay algunos aspectos a tener en cuenta primero que la mayoría de los países están actualizando sus normativas, y también que es muy dispar el aspecto económico para atender esas situaciones. El resto de los aspectos están más desarrollados.
Los bancos de vacunas y antígenos para atender posibles emergencias no son una realidad planificada en la región, si bien Paraguay ha hecho algunos avances, afirmó.
En relación a la transición del estatus para ser libres sin vacunación. Bolivia y Brasil están haciendo avances, y en este último país tiene varios estados ya con ese estatus. Paraguay y Uruguay no muestran avances. Y Chile ya es considerado libre de la enfermedad.
Luego, Marcelo Signorini, MV investigador INTA-CONICET, hizo el análisis cuantitativo de riesgo para un brote de fiebre aftosa.
La evaluación consideró todos los elementos que influirían ante el ingreso de animales infectados. Para esto primero debería darse un brote de fiebre en un país vecino, explicó, y después que los animales estén infectados y sean elegibles para exportar.
«Cuanto mayor cantidad de animales se importen mayor sería la probabilidad de un brote«, indicó, pero la principal fuente de incertidumbre es el ingreso ilegal de bovinos. La posibilidad de que fallen los test de detección en frontera es otra consideración, para la hacienda.
Este primer modelo consideró estas variables, con base de información desde el año 1996 hasta ahora. El riesgo de ocurrencia es casi imposible, aún teniendo en cuenta la importación ilegal.
Si hubiera algún problema, el modelo considera que se podría pensar en promedio en un brote cada 69 años por este factor.
Natalia Aznar, MV investigadora de INTA dijo que ahora esperan aplicar el modelo en un menor plazo de tiempo, observando la posibilidad de un brote en países vecinos y pensando en poder ponderar la susceptibilidad de la barrera sanitaria ante la fortaleza y debilidad de las fronteras.
