Las precipitaciones se activarán por encima de la media en la mayor parte de la región sudamericana, estimó la BC, incrementándose los riesgos locales.
Una franja de intensa actividad correrá por el centro-oeste de Bolivia, penetrando en el NOA, con riesgo de fuertes tormentas, con aguaceros y vientos, pudiendo causar anegamientos e inundaciones.
Otro extenso foco de tormentas se posicionará sobre el Litoral Fluvial Argentino, irradiando su acción hacia las zonas circundantes, con riesgo de crecidas en las cuencas de los grandes ríos y anegamientos en zonas bajas.
El sudoeste de la Región Pampeana recibirá lluvias moderadas a abundantes que traerán alivio a los déficits que viene sufriendo la zona, aunque sin lograr erradicarlos.
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Las tormentas cordilleranas conservarán una intensidad algo superior a la normal para la estación, haciendo sentir sus efectos sobre el centro y el sur de Chile y gran parte de Cuyo.
Sólo el norte del Chile, y algunos focos aislados en diversas zonas de la Región observarán precipitaciones moderadas a escasas.
La temperatura ascenderá, asumiendo valores algo superiores a lo normal, al mismo tiempo que las irrupciones de aire polar reducirán gradualmente su alcance e intensidad.
No obstante, el sur y centro de Chile, el sur y centro de La Argentina y gran parte del Uruguay experimentarán el riesgo de heladas tardías hasta mediados de la primavera.