Patricio Gunning, líder de Asuntos Institucionales del Cono Sur, se refirió a los proyectos orientados hacia la sustentabilidad y el desarrollo interno en una iniciativa que comenzó hace unos años y culminó con la propuesta de Pro Carbono de Bayer pensada para ayudar y co-crear un sistema de captura, secuestro y retención de carbono que al productor argentino le servirá en un futuro cercano.
Gunning señaló que el productor argentino tiene un perfil vanguardista en el agro y requiere un nivel de atención permanente por esa característica. Junto con los agricultores de Brasil, Estados Unidos y Australia tienen un rol muy importante en la producción alimentaria mundial. O sea que el argentino lleva varias décadas de experiencia en el uso de tecnologías sustentables y es dentro de esa realidad que Bayer busca generar un puente entre el negocio y la sustentabilidad.
“Desde el año 2014 pensamos en un sistema agronómico en el cual las rotaciones con cultivos de renta, de servicio y prácticas agrícolas hagan de esto algo tangible para poder estar en un mercado de carbono entre el mediano y largo plazo”, explicó a RD.
Pro Carbono es una iniciativa inclusiva, destacó, y eso se puede apreciar por la adopción lograda en países como Brasil que hoy incluye a unos 1.800 productores. Argentina no ha sido la excepción porque Gunning destacó que el programa estaba pensado para 100 productores y las solicitudes superaron ampliamente ese cupo.
“Dentro de un seguimiento, con una certificación socioambiental con un asesor independiente (que no es de Bayer) vamos a ir ayudando o aportando conocimiento a estos productores para que puedan tener este engranaje de medición, captura y balance de carbono ajustado a un mediano plazo. Por qué de esta manera? Porque aún no sabemos cómo será el trading de carbono, no está claro a nivel mundial. Por ello nos focalizamos en la hectárea del productor para que dentro de tres años tenga muy definida esa radiografía de su campo, y luego de ese paso podrá pensar en las acciones de un mercado que ya vamos a tener más aceitado como cadena”, explicó.
Se comenzó con cien interesados en el país, pero se espera que esa cifra vaya escalando porque hay miles de productores con hectáreas agrícolas. Esto se debe abordar como una iniciativa nacional que sirva para pensar cómo producir de una forma sustentable y al mismo tiempo considerar que el comprador también pueda ver la trazabilidad del sistema.
El monitoreo y la medición no son ideas nuevas en el agro, y desde Bayer hace años que se observan los indicadores de producción, económicos y ambientales, porque son tres aspectos que deben ir juntos. La acumulación de materia orgánica, biodiversidad y la disminución de aplicaciones por hectárea van mostrando que este tipo de modelos sustentables están funcionando y sobre esa base es que se asienta Pro Carbono. Gunning consideró qué hay que focalizarse en la relación que tendrán el productor y mercado global de carbono, y dentro de esa línea se propone una forma de trabajar durante tres años para ver de qué forma se puede dar la inclusión en el sistema mundial.
PENSAMIENTO REGIONAL Y ESTÁNDARES GLOBALES
“Hablamos ahora de regiones, porque esto está pasando en Brasil, va a pasar en Paraguay y en EE.UU. Y es muy importante la vinculación entre los productores porque lo que estamos viendo a corto plazo es que las hectáreas nos unen en este tema. Nos parece importante, ver cómo hacemos entonces el intercambio de conocimiento desde un productor del Mato Grosso Do Sul, a uno de General Pico o de Tancacha. Así debemos analizar cómo crear un modelo que tiene que ver con particularidades ambientales de cada región, pero por otro lado hay procesos de medición, certificación y trading que van a ser estándar a nivel global”, concluyó.
