“Durante el martes 29 de marzo un sistema frontal frío avanzó por la porción central del país ingresando una masa de aire frío y seco sobre la región pampeana”, explicó el informe de INTA Anguil.
El fenómeno dejó el registro de las primeras heladas contundentes, meteorológicas y de tipo agronómicas sobre sectores de Buenos Aires, La Pampa, centro y sur de Córdoba y sur de San Luis. Por ejemplo, en la localidad de Anguil, en observatorio agrometeorológico de INTA, el día 31 de marzo pasado se registró una mínima de -1,6 °C en casilla meteorológica y -4,6°C a nivel de superficie.
Si bien la intensidad y duración del fenómeno no han sido tan extremas, el momento de ocurrencia fue el factor desencadenante de daños en cultivos estivales en la provincia. Principalmente la región noreste y central fueron la que registraron mayor área afectada en estos cultivos. Se han informado lotes afectados de soja y maíz tardíos, (la superficie y la gravedad del daño en estos cultivos aún no ha sido cuantificada).
En las zonas productivas de la provincia no existe lugar geográfico libre de heladas. Los daños por temperaturas extremas en las regiones agrícolas pueden provocar desde la pérdida de calidad del producto, hasta la pérdida total de la cosecha, dependiendo del momento de ocurrencia, de su intensidad, de su duración y del estado fenológico de los vegetales al momento del fenómeno.
Lo normal (climatológicamente hablando) es esperar las primeras heladas a principios de mayo en el norte de la provincia y en la tercera década de abril en la región central. Sin embargo, la variabilidad del fenómeno hace que en algunos años puedan producirse anticipadamente y afectar a los cultivos de cosecha estivales tardíos porque aún no han culminado su ciclo, y sus estados fenológicos actuales los hacen más vulnerables a este daño, poniendo de manifiesto uno de los principales riesgos de la producción agropecuaria regional.
*Helada meteorológica: considerada cuando la temperatura del aire, medida con un termómetro instalado en casilla meteorológica a una altura de 1.50 metros sobre el nivel del suelo, es de 0 °C (cero grados Celsius) o inferior (O.M.M., 1990).
Si bien las heladas son frecuentes durante la estación de invierno, cuando ocurren a principios de otoño se las suele denominar como heladas tempranas, y es precisamente cuando los vegetales tienen una gran sensibilidad a los descensos bruscos de temperatura.