«Estamos haciendo una producción de hortalizas mediante prácticas agroecológicas«, dijo Ricardo Peralta, quien lleva adelante tareas de cultivo en el Parque de Producción Social (PPS) de General Pico, un espacio ubicado a 800 metros de la salida hacia la ruta provincial 4.
Recientemente se organizó allí una capacitación sobre zapallo, teniendo en cuenta que estamos cerca de la fecha de siembra y contando con la presencia de un especialista de Facultad de Agronomía de la UNLPam.

El PPS es un proyecto que depende del municipio piquense, con apoyo de técnicos del INTA, que se enfoca en el área de restricción ambiental, que es la zona periurbana donde no se deben realizar aplicaciones con fitosanitarios. «La única opción en esta zona es producir hortalizas de manera orgánica«, señaló.
«La chacra, o el predio, ha presentado muchos desafíos por las plagas y malezas por eso el manejo es complejo y la elección de los cultivos que hacemos está orientada a los más rústicos«, indicó. Se trata una producción de secano que depende de las precipitaciones y tiene un poco de riego complementario.
«Hemos ensayado con cultivos fáciles de hacer, como el zapallo que ha dado buen resultado. El ajo también anduvo bien y es la primera vez que se hace en la zona. Y ahora vamos a incursionar con la batata«, explicó Peralta.
Otro desafío que mencionó es la mano de obra, porque en esta región la horticultura extensiva o de grandes superficies no es muy habitual, entonces no hay gente con mucha experiencia en esas labores. Pero además se trata de utilizar maquinarias que sirvan a ese propósito.
De esta manera se buscan cultivos fáciles de sembrar, de bajo mantenimiento y que lleguen a cosecha lo más rápido posible.
«La intención es producir hortalizas en gran volumen y llegamos al consumidor directamente. Tenemos un producto libre de químicos, orgánico, que es producido localmente. El consumidor incluso puede conocer el origen de esas hortalizas, por la trazabilidad que da más confianza a la gente«, dijo el entrevistado.
La propuesta está pensada, agregó, para producir conocimiento de los cultivos en la región, para dar a conocer un modelo de horticultura extensiva probado localmente y aprovechar así espacios de refugio ambiental.








