Jóvenes, mujeres, empleados, productores y estudiantes se sumaron a la propuesta de capacitación para alambrado eléctrico y tradicional desarrollado ayer y hoy en el predio de la Sociedad Rural de General Pico.
La propuesta de formación se organizó de forma interinstitucional con el espacio de educación METAS de la rural piquense, la delegación pampeana del RENATRE, el municipio de la ciudad, la Secretaría de Trabajo de la provincia y colaboración del INTA.
La actividad se relaciona con una necesidad manifiesta de capacitar cada vez más al agro pero también porque es un oficio que ha sido requerido en la zona, según indicaron desde la comuna con la presencia de la directora de Nuevas Economías, María del Carmen García Suárez. Y ante esa convocatoria respondieron interesados desde General Pico, Vértiz, Arata y Miguel Riglos.
Por otra parte, el curso tenía un cupo previsto y la cantidad de interesados superó esa capacidad, teniendo en cuenta que la cantidad de personas estaba pensada para poder cubrir la práctica de forma más personalizada.
Este tipo de jornadas no sólo están pensadas para mejorar las condiciones en el campo, y ayudar a la producción, sino que contemplan temas de seguridad que son necesarias en el trabajo rural.
El uso de alambrados eléctricos forma parte de la inversión en infraestructura de todo establecimiento, y la jornada brinda herramientas acerca de colocación, funcionamiento, mantenimiento, costos estipulados, medidas de seguridad y sistemas homologados.