Mariano Williams, tesorero de CARBAP, dijo que el ganadero está invirtiendo a un ritmo menor que antes de las restricciones a la exportación pero debe cuidar stock y genética porque luego son difíciles de recuperar.
Williams visitó la provincia dentro del encuentro organizado por la entidad dentro del cronograma de visitas y actividades por el 90º aniversario. Como productor ganadero de la zona la cuenca baja del Río Salado en la provincia de Buenos Aires, indicó que la principal preocupación es la restricción de exportaciones para carnes, que afectan la producción y las inversiones.
Explicó a RD que el impacto de la pandemia no tuvo impacto en la ganadería en comparación con el perjuicio que representan las restricciones a la exportación.
«Hasta abril del año pasado veníamos muy bien cuando el gobierno dispuso estas trabas a las exportaciones. Los ganaderos venían invirtiendo y ampliando el stock en todo el país», consideró.
Williams agregó que la guerra Rusia/ Ucrania afecta con el valor de los granos pero en eso se puede esperar que al cesar el conflicto los precios vuelvan a acomodarse. «El productor agropecuario argentino es optimista y siempre tira para adelante. Yo creo que vamos a ir invirtiendo, aunque sea a menor ritmo», dijo.
La reactivación de las ventas al exterior sigue siendo una expectativa, manifestó, porque en algún momento el gobierno nacional deberá «rever muchas medidas que han tomado y dar marcha atrás». Agregó que la perdida de hacienda en stock y genética es muy difícil de recuperar si el productor lo debe vender por complicaciones económicas.