El valor de la miel ha sumergido a los apicultores en una situación de supervivencia tratando de esperar épocas mejores.
Adrián Bonino, productor apícola con unos 40 años de trayectoria, se refirió a la complicada situación de la producción de mieles y recordó que siempre «hubo altibajos» pero nunca se llegó a un momento de inflación como el actual, cuando en simultáneo no acompaña el precio de la miel.
El peso argentino está devaluado y al mismo tiempo el precio en dólares no ha subido. «Nosotros vendemos a granel y el valor que nos pasan es en dólares. Hoy hablamos de 80 centavos de dólar cuando en otro momento llegamos a vender hasta a dos dólares«, comentó a este portal.
Bonino señaló que se está en un momento en el que es imposible cubrir costos, porque aumentó el combustible, el azúcar y otros insumos, por esa razón quienes quieren seguir en esta producción ven cómo subsistir. El entrevistado comentó que él mantiene sus colmenas en la zona, sin salir de la provincia, llegando hasta Winifreda, pasando por Villa Mirasol y más cerquita entre Speluzzi y Vértiz.
Al momento de extraer la miel como socio de la Cooperativa Apícola Patagonia usa la sala ubicada en General Pico, desde donde salen sus tambores.
La apicultura es parte de su vida, y uno de sus hijos que es ingeniero agrónomo es el que a veces le ayuda. Sin embargo, ha podido formar a otros apicultores pampeanos como es el caso de algunos jóvenes ayudantes que luego se independizaron.
Bonino fue parte esta mañana de un grupo de apicultores beneficiados por el programa de fortalecimiento apícola cuyos convenios se firmaron en la cooperativa.