“La condición general de los cereales de invierno es Muy Buena – Buena” asegura el reciente informe la Bolsa de Cereales y Productos de Bahía Blanca.
Los sucesivos eventos de precipitaciones ocurridos durante el inicio de la primavera permiten el correcto desarrollo de los cereales durante la etapa de encañazón/espigazón.
En cuanto al estado sanitario, la mayor humedad presente a nivel de lote mantiene las condiciones propicias para el avance de enfermedades foliares, principalmente de roya estriada, bacteriosis y virus mozaico estriado del trigo (WSMV).
Para el trigo, el 2% de la superficie destinada a este cultivo comienza la espigazón (principalmente en la zona norte) y el 98% restante transita la encañazón.
En cuanto a cebada, el 45% se encuentra finalizando la encañazón mientras que el 55% restante comienza la etapa de espigazón.