El área implantada con cultivos de fina registró una caída interanual del 6% alcanzando las 2,35 millones de hectáreas frente a las 2,50 M ha del pasado año, informó la Bolsa de Cereales y Productos de Bahía Blanca.
La siembra de los cereales invernales está prácticamente finalizada, restando sembrar los últimos lotes destinados a trigos de ciclo corto.
El área implantada con cultivos de fina registró una caída interanual del 6% alcanzando las 2,35 M ha frente a las 2,50 M ha del ciclo anterior. Las abundantes lluvias de marzo recargaron los perfiles, incrementando la intención de siembra y proyectando inicialmente un aumento de la superficie destinada.
Sin embargo, la leve baja interanual de los precios de los granos, el encarecimiento de insumos clave para la producción y los excesos hídricos en algunos partidos del centro- este bonaerense dificultaron la concreción de la superficie estimada. Como consecuencia, se observó una reducción en la cantidad de hectáreas destinadas a trigo y cebada.
En aquellas zonas donde se realizaron las labores de siembra en tiempo y forma, los cultivos transitan desde la emergencia hasta el macollaje con un buen estado y adecuada sanidad. Por otro lado, partidos del oeste bonaerense y ciertos departamentos de La Pampa se encuentran con escasa humedad en los primeros centímetros del perfil, siendo necesarias lluvias para mantener la buena condición de los cereales.