Pensando en el manejo para la zona sur de La Pampa y zonas con ambientes similares, el ingeniero agrónomo Daniel Angolani, de la AER General Acha del INTA y especialista en control de leñosas con herbicidas, se refirió a los ensayos e investigaciones con aplicación práctica a la producción agropecuaria.
En la reciente jornada regional de malezas, desarrollada en nuestra ciudad el miércoles 18 de junio, hizo una presentación sobre control de leñosas como alpataco, piquillín y caldén según los ensayos realizados desde la agencia. También se refirió a una investigación sobre control de olivillo.
En diálogo con RD manifestó que una maleza se considera problema cuando ocupa un área que debería tener pasto como forraje y alimento para la producción ganadera. Hay diferentes estrategias para el manejo de las malezas y Angolani manifestó que no son aspectos excluyentes, se trata de quemas prescriptas, raleos manuales o mecánicos y la aplicación de herbicidas.
El entrevistado consideró que determinar el avance de una maleza se puede lograr de distintas maneras, pero es vital el entendimiento del productor que conoce su campo con el estado de sus potreros y la historia de ese lugar (pensando en la producción que se hizo allí antes). La información visual es un insumo muy importante, comentó, y se pueden agregar algunas técnicas de medición para saber a partir de qué área de cobertura o cerramiento hay que comenzar a intervenir.
Ante la consulta sobre la relación entre el estado de los suelos y la proliferación de las malezas, analizó que en la zona de caldén y monte donde trabaja los suelos son más pobres si se los compara con los del noreste pampeano. Sin embargo, las malezas muestran adaptación a esos ambientes y tienen distintos mecanismos para poder retornar luego de un disturbio, eso significa que si se hace una quema o un rolado sobre la planta como son muy resistentes vuelven a aparecer en la zona.