La implantación de pasturas perennes puede atraer múltiples ventajas, como por ejemplo estabilizar la oferta forrajera y el pasto llorónes una buena opción y muy difundida en la región pampeana, dieron a conocer desde el INTA.
En aquellos establecimientos con pastizal natural, donde predominan gramíneas invernales, la incorporación de una pastura perenne de crecimiento primavera-estival como el Pasto Llorón (Eragrostis curvula).
Esta especie tiene la particularidad de que la mayor calidad forrajera la presenta en el rebrote, y empieza a disminuir a medida que avanza la estación de crecimiento. En busca de opciones para evaluar si es posible que la disminución de calidad no sea tan pronunciada, la Agencia INTA General Acha, en conjunto con el Ing. Agr. Pablo Frances, iniciaron un ensayo en el establecimiento “El Jagüel” ubicado en cercanías de General Acha (La Pampa)
En una pastura de Pasto Llorón se delimitaron cinco tratamientos de dosis creciente de fertilizante, la empresa Alena La Pampa realizó la fertilización con urea al inicio del rebrote. La primera evaluación se realizó la tercera semana de diciembre, donde se tomaron muestras de suelo, se determinó densidad de planta, tamaño de corona y recolecto forraje para determinar producción y calidad. Se están acondicionando las muestras, por lo cual todavía no contamos con resultados, los mismo serán publicados cuando estén disponibles








