Llegan guanacos desde Santa Cruz para recuperar las poblaciones pampeanas

En un viaje de 1600 kilómetros, un grupo de guanacos silvestres fue trasladado desde la provincia de Santa Cruz hasta la provincia de La Pampa, donde la especie está casi extinta.  

La acción, conocida como “translocación”, fue posible gracias al trabajo conjunto de las provincias de Santa Cruz y La Pampa, el Ministerio de Ambiente de la Nación y Rewilding Argentina.

El guanaco es uno de los mayores herbívoros de Sudamérica. En Argentina se encontraba en casi todo el territorio exceptuando la Mesopotamia y sus alrededores, y uno de los lugares donde la especie se extinguió casi por completo es La Pampa, donde actualmente subsisten pequeñas poblaciones, como la del Parque Nacional Lihue Calel. Para revertir esta situación, en 2018 el Gobierno de La Pampa comenzó un proyecto de reintroducción del guanaco en el Parque Provincial Luro.

Fabián Tittarelli, subsecretario de Ambiente de La Pampa, afirmó a la Agencia Provincial de Noticias que “el programa que llevamos adelante desde el Gobierno provincial denominado “El Retorno de los Nuestros” busca revalorizar las especies nativas y la cultura pampeana, de la cual el guanaco es un exponente destacado; los trabajos de restauración de fauna que llevamos adelante en Parque Luro se están convirtiendo en referentes de la recuperación de la naturaleza en Argentina”.

A su vez, Santa Cruz es la provincia con la población de guanacos silvestres más grande de Argentina, además de tener una de las poblaciones más estudiadas en los últimos años en el Parque Patagonia, en el noroeste de la provincia. como el guanaco. Estos trabajos se dan en el marco de la Década de la Restauración 2021-2030 instituida por la ONU y colocan a la Argentina a la vanguardia de restauración de especies.

El 12 de diciembre se pudo realizar el primer viaje experimental de cinco guanacos silvestres desde Parque Patagonia (Santa Cruz) a Parque Luro (La Pampa).
Sebastián Di Martino, director de Conservación de Rewilding Argentina, comentó que “el viaje de 22 horas transcurrió en perfectas condiciones. En este traslado experimental se pudo evaluar el comportamiento de los individuos y su nivel de estrés. A la llegada, no hubo consecuencias de arreo, captura y traslado y los guanacos inmediatamente se pusieron a comer en el corral de presuelta, donde estarán unos días para aclimatarse y hacerles un seguimiento”.

Esta translocación de guanacos silvestres será repetida para llevar 40 individuos más a La Pampa para enriquecer y afianzar la población incipiente del Parque Luro. También representa un gran comienzo para reintroducir el guanaco a muchas regiones de la Argentina donde lo hemos extinguido.