Los últimos puesteros: De a poco

Se fueron yendo de a poco
del corral de la existencia,
”guacha” quedó mi querencia
y las familias que había,
dejaron casas vacías 
en el rincón de la ausencia.
Aquellos corrales rotos
donde se encierra la nada,
nostalgias de una manada
que pastaba en el potrero,
la ausencia de los puesteros
dejó esa tierra callada.
Colgando del horizonte
solitarios los molinos,
tristes mirando el camino
como buscando un espejo,
para poder ver más lejos
y así olvidar su destino.

Versos extraídos del libro: Los últimos puesteros, con permiso del autor, Ariel “Alpataco” Vázquez.