“El agua nos ayuda a tener esperanza de que los cultivos crezcan y los forrajes para la hacienda también, lo que evidentemente es un aliciente porque con las lluvias es un cambio desde principios de diciembre hasta ahora”, manifestó Martín Navarro, presidente de la Comisión de Enlace de Sociedades Rurales de La Pampa.
Pese al impulso del clima, el dirigente manifestó que la suspensión de la venta de agroquímicos en la provincia complica mucho por el ataque de plagas a los cultivos viendo la presencia oruga y chinche en soja y girasol.
“Esto puede afectarla economía del productor, la economía de la provincia, la economía de la Nación y de cada uno de los ciudadanos porque la coparticipación va a ser menor”, explicó.
Navarro manifestó que la nueva ley de plaguicidas que propone el gobierno pampeano requiere un análisis profundo, porque se trata de cuidar el ambiente y también la producción. Además, en relación a los fitosanitarios y los insumos usados hay que lograr un acuerdo porque las opiniones deben basarse en estudios de incidencia.
El dirigente rural manifestó que en relación a la normativa no hubo un anticipo o consulta para poder participar en el proyecto.