Tras la confirmación en laboratorio del diagnóstico positivo, el Senasa inició acciones sanitarias para la atención de la enfermedad.
El protocolo correspondiente incluyó la interdicción del predio, aislamiento del positivo, bloqueo de ingresos y egresos, y verificación del estado sanitario de los equinos presentes en el lugar.
Si bien los primeros análisis realizados sobre el resto de los animales dieron negativos, se realizarán nuevos muestreos serológicos a fin de continuar con la investigación epidemiológica del caso.
La AIE es una enfermedad viral que se transmite por la picadura del tábano y/o el uso de objetos cortopunzantes que contengan sangre infectada. Por lo general no presenta síntomas específicos, aunque en ocasiones algunos caballos pueden manifestar –en un estado clínico agudo— fiebre, anemia, edema y/o caquexia.
La Argentina establece bajo Programa la realización de un test serológico previo al traslado de equinos, que debe ser negativo. Asimismo, se recomienda a los propietarios que implementen la prueba al ingreso de los animales a los predios, como así también, un examen diagnóstico a la totalidad de los equinos una vez por año.