Cómo analizar la fecha de siembra del trigo en nuestra región

El INTA realizó un informe técnico acerca de las fechas de siembra de trigo en el área agrícola de La Pampa y riesgos agroclimáticos en condiciones de secano.

El objetivo del estudio y su publicaciónes «es alcanzar la mayor productividad posible junto con una óptima calidad de grano. Para lograrlo, es fundamental: 1. Posicionar la espigazón en el momento de mayor cociente fototermal (alta relación entre radiación incidente y temperatura media durante el período crítico) para evitar el riesgo de la exposición a bajas temperaturas (heladas en primavera). 2. Ubicar el periodo de llenado de granos en momentos de menor riesgo de exposición a temperaturas extremadamente altas que puedan provocar golpes de calor. Estos objetivos se logran con la elección de la fecha de siembra óptima para cada cultivar según su ciclo de crecimiento». 

Considerando el clima se explicó acerca de las fechas de probabilidad de ocurrencia de heladas
en la región donde sembramos. Porque en términos generales para el área agrícola provincial la fecha promedio de ultima heladas calculada sobre los últimos 30 años ronda el 2 de octubre en el centro del área y adelantándose unos 5-10 días a medida que nos movemos hacia el norte. Sin embargo, advierten, debemos considerar que la variabilidad interanual es importante.

Acerca del calor, el mismo informe consideró que las temperaturas máximas mensuales son mayores en diciembre, con una probabilidad de ocurrencia de temperaturas extremadamente altas (>35ºC) del 70%. En cambio, en noviembre esa probabilidad baja al 40 %.

La elección del cultivo también será definitoria, observando las ventajas de los trigos de ciclo largo e intermedio. «Una mayor duración de las subetapas permite maximizar el rendimiento potencial, aunque
también incrementa la probabilidad de exposición a bajas temperaturas o heladas (agrometeorológicas), lo que favorece la aclimatación del cultivo frente a posibles eventos durante las fases reproductivas. Además, se estimula tempranamente el desarrollo del sistema radicular, lo que aumenta la probabilidad de alcanzar mayores profundidades del perfil edáfico y aprovechar más eficientemente la humedad acumulada. La elección adecuada de la fecha de siembra, en función del cultivar, permite sincronizar la floración con el momento óptimo de condiciones ambientales, maximizando el rendimiento y asegurando que el llenado de grano ocurra en condiciones que favorezcan la obtención de una alta calidad panadera.«