El séptimo Seminario Acsoja comenzó hoy en Rosario con un amplio panel de especialistas y toda la información para analizar la cadena de la soja. La meta productiva anunciada fue de 70 millones de toneladas pensando en exportar y crecer.
La apertura se realizó en horas del mediodía con la presencia del presidente de la entidad, Luis Zubizarreta, el secretario de Agricultura de la Nación, Juan José Bahillo, el presidente de la Bolsa de Cereales de Rosario, Miguel Simioni, y autoridades de la provincia de Santa Fe.
«Somos una cadena que opera muy por debajo de su potencial«, señaló Zubizarreta en su discurso, indicando que hoy se está en un 30% por debajo del récord de cosecha y en lo industrial hay una capacidad ociosa cercana al 50%. Ante esta situación se refirió al perjuicio de las políticas públicas, que incluso han sido nocivas para el Estado.
«Nuestro planteo pasa por una estrategia realista que nos permita llegar rápidamente a 70 millones de toneladas«, afirmó. Por esa razón, se busca una estrategia federal que permita tener una agenda agroindustrial de trabajo. Esto implica pensar en sustentabilidad, nuevas tecnologías, exportaciones y la búsqueda de generar confianza.
Se solicitó que se vuelva atrás con dos medidas: Aumento de intereses a los actores de la cadena y el impedimento a operar de ciertos mercados financieros. También, pensando en la siembra y producción para el 2023, pidió que se definan a la brevedad los beneficios anunciados con el decreto 576 para los productores que apuesten a la soja en la próxima campaña.
VALORAR LA PROFESIONALIDAD DE LOS PRODUCTORES PEQUEÑOS
El secretario de Agricultura, Ganadería y Pesca, agradeció la invitación para estar presente y afirmó que tienen la responsabilidad para que cada sector alcance su máximo desarrollo y se refirió a los datos actuales de la cadena de la soja que son de público conocimiento para poder valorar a este cultivo.
La soja implica 14.100.000 hectáreas en la última campaña, abarca a unos 60.384 productores en el país con un 78% en condición de arrendamiento. La mayoría, más de 70%, siembran menos de 200 hectáreas, indicó, y esto refleja la importancia en el interior «del desarrollo de los escalones primarios», con muchos argentinos comprometidos en la actividad y en apuntar a la tecnología. Aclaró que aun en agricultura de baja escala se ve un «alto nivel de profesionalismo».
En el relevamiento de lo que invierte el sector, lo que «entierra», de esas hectáreas registradas se suman más 10.000 millones dólares cada año (con gastos directos entre insumos, semillas y arrendamiento), y a ello se debería agregar lo que viene después con laboreos, comercialización, acopio y más.
Es una cadena que agrega valor y exporta el 92% de lo que produce, muy poco sale del país como granos, según destacó. Esta cadena vende aceite, harina y grano supera los 29.389 millones de dólares, más lo que se va al mercado interno como derivados para alimento animal y para producir biodiésel.
Bahillo alentó al diálogo, y dijo que bien si las medidas no siempre permiten coincidir en los tiempos o en la oportunidad, se sostiene el objetivo de solucionar los problemas a través del crecimiento del país. Lo que se debe observar, agregó, es cómo llegar a un acuerdo sobre las condiciones que afectan previsibilidad, producción e inversión de los productores.
