Qué será de nuestra tierra me pregunto hacia el futuro, cuando no haya más laburo se marcharán de este suelo, montando otra vez en pelo esa tropilla de oscuros.
No me imagino a esa zona sin vacas y sin terneros, sin recados, sin los cueros penando en el suelo agreste, será muy triste del Oeste sin puestos y sin puesteros.
Ya nadie cuida las chivas sólo al puma le interesa, encima de las pobrezas se han aumentado las plagas, en los corrales no hay playa sólo abrojos y malezas.
Versos extraídos con permiso del autor, Ariel Alpataco Vazquez, del libro Los últimos puesteros.