Carlos Souto, presidente de Gente de La Pampa y Energías Renovables, dos empresas que desde Catriló emplean a cientos de pampeanos y producen a partir de granos de girasol y soja.
En diálogo con RD explicó que todo comenzó en el año ‘76 “como una ilusión de los socios para generar trabajo en la provincia, elaborando las materias primas y evitar de alguna manera el éxodo de los chicos que no tenían muchas oportunidades en La Pampa”.
En los años 80 por diferentes problemas debieron cerrar y reabren en 1982 con la misma idea pero con un proyecto que en el ‘86 logra trasladar la aceitera y la producción de alimento balanceado desde la capital provincial hacia Catriló.
El crecimiento de esta empresa se ha logrado con la reinversión de las utilidades, esfuerzo, apoyo gubernamental de la provincia y sobrellevando algunas de las políticas nacionales que han sido perjudiciales.
“Hoy estamos moliendo soja y girasol. Del girasol salen el pellet como complemento proteico y aceite, ya sea crudo (que se vende en muy poca cantidad) o para elaborar porque la mayoría lo refinamos para vender a granel y fraccionado. En la molienda de soja se usa el poroto para generar una harina proteica de uso animal y el aceite crudo que se transforma en biodiésel”, manifestó.
La elaboración de biodiésel no está en su capacidad máxima, señaló, sólo al 20 ó 25% de lo que se hacía hace seis meses. En parte debido a los inconvenientes de políticas nacionales. Pero igual se transforma el aceite obtenido en molienda propia.
Con las harinas de soja y girasol más otras materias primas como maíz y afrechillo de trigo se produce el alimento balanceado destinado a bovinos.
“Otro alimento que llevamos a la góndola y con el que nos identifican es la mayonesa Lágrimas del Sol. Llevamos más de 25 años produciéndola y respetando su receta original”, aseguró.
SOPORTAR LAS CRISIS
Souto recordó que con la crisis del aceite en el año 2006, y la política de subsidio a las grandes empresas, Gente de La Pampa optó por exportar y desde entonces aún cuando el mercado interno tenga demanda hay clientes fuera del país que se mantienen. “En estos momentos estamos exportando a Chile, Costa Rica, Colombia, Panamá y Paraguay, tenemos clientes que para nuestra empresa son importantes”, indicó.
La estrategia para subsistir, aclaró, es integrar producciones y cubrir toda la cadena al moler, tener el aceite crudo, refinar y elaborar productos. Así se distribuyen los costos, manifestó. Se mantiene la planta funcionando siempre y el personal es estable porque se va adaptando a las necesidades de producción.
Acerca de la relación con el gobierno provincial, el empresario manifestó que a todos los estados les interesan las empresas pero cada gobierno tiene su impronta sobre la industria. En años anteriores se ha visto una tendencia más hacia la micro industria, consideró, pero en cada instancia de diálogo se trata de resaltar que una empresa como Gente de La Pampa fomenta a su alrededor muchos pequeños emprendimientos que significan desarrollo local y así se mantienen las utilidades dentro de la provincia para seguir invirtiendo.
